El
Ducado de Sueca es un título nobiliario de Castilla, creado el 8 de marzo de 1804 por
Carlos IV de España, para su primer Ministro Don
Manuel Godoy y Álvarez-Faria, al que ya le había concedido el
ducado de la Alcudia, en 1792. Hace referencia a la ciudad de
Sueca,
en la provincia de Valencia (España) por entonces capital de la
riquísima comarca de la Albufera de Valencia. El mismo rey le había
concedido el título de Aragón
barón de Mascalbó y el más importante: "Príncipe de la Paz" con el tratamiento de Alteza Serenísima.
Ostentó el título portugués de Conde de Évoramonte.
El título hereditario de "Príncipe de la Paz" es uno de los pocos
títulos de príncipe en la nobiliaria española, ya que el título de
Príncipe sólo se da al sucesor de la Corona, que es Príncipe de
Asturias, de Gerona y de Viana. Se volvió a crear otro título de
príncipe por la reina
Isabel II, para el general liberal y regente don Baldomero Espartero, al que se le instituyó vitaliciamente "Príncipe de Vergara".
Se le otorgó por el Papa el título pontificio de "Príncipe de
Basano", en compensación a su renuncia al título, ya en el exilio
romano, de "Príncipe de la Paz". Está por estudiar el motivo de esta
renuncia/intercambio, posiblemente relacionado el exceso del título en
relación a la profecía de Isaías 9, 1-6.
Manuel Godoy y Álvarez Faria consiguió, del rey
Carlos IV, la concesión para su hermano Diego Godoy y Álvarez Faria el
Ducado de Almodóvar del Campo, aunque éste no tuvo descendientes que lo hubieran podido suceder.
Anteriormente a tales títulos, Manuel Godoy, obtuvo el título previo
de "Marqués de Álvarez", extinguido cuándo alcanzó sus ducados. Por esa
razón sus sucesores no ostentan este título nobiliario.
A caballo entre los títulos y los cargos, Manuel Godoy ostentó el de "
Señor de Soto de Roma". No se trata propiamente de un título nobiliario, sino que hace referencia a su potestad
semifeudal
sobre la propiedad rústica del mismo nombre sita en Romilla, municipio
de Chauchina, Provincia de Granada. De modo parecido Godoy fue "Señor de
la Albufera" o "Señor de Albalá", lo que hace referencia no tanto a
títulos nobiliarios sobre tales lugares, como a derechos de propiedad y
censitarios sobre los mismos. De hecho estos "Estados" fueron comprados o
permutados a la Corona por Godoy. Caso parecido las inmensas
propiedades en la Real Dehesa de la Serena (Badajoz) apropiadas para el
agostadero de la cabaña ovina, adquiridas por Godoy, con autorización de
la Corona, que conllevaban lo que hoy día nos parecen extraños
privilegios, como el derecho a cobrar peajes, pontonazgos y derechos de
paso de ganados sobre los ríos Guadiana y Zújar en la localidad de
Esparragosa de Lares (Badajoz) y otras.
Por último, sus cargos en la Orden Militar de Santiago, también le
conferían potestades semifeudales y de contenido económicomico en zonas
de Badajoz como Aceuchal, Puebla del Prior o Ribera del Fresno.
Por tanto, cargos y títulos tenían por entonces un contenido económico y jurisdiccional del que hoy día carecen.
En sentido del otorgamiento del Ducado de Sueca a Don Manuel Godoy
está íntimamente unido a la riqueza que a su poseedor otorgaba la parte
de los derechos de pesca en la albufera de Valencia que correspondía al
Señor de la Albufera. La hija de Manuel Godoy litigó hasta finales del
siglo XIX contra el Ayuntamiento de Sueca para evitar la extinción de
estos derechos señoriales.
Manuel Godoy era de origen suficientemente noble como para ingresar
en la Real Guardia de Corps. Pero esta nobleza y su pareja riqueza no
fueron suficientes cuando la magnanimidad del Rey comenzó a encumbrarle a
mayores cargos. Su ascenso fue paralelo en riqueza (con la adquisición
de los Estados mencionados) nobleza (adquisición de títulos de Alteza
Serenísima, príncipe y dos ducados con Grandeza de España de 1ª clase,
esposo y yerno de Infante/a de España) administrativa (primer Ministro,
Secretario de Estado, Presidente del Consejo) y Militar (Mariscal,
Generalísimo, Gran Almirante).
Esta gran riqueza e importancia eran condición indispensable para
ostentar el gobierno sobre unos súbditos-magnates de enormes riquezas y
alianzas genealógicas y familiares. Con este encumbramiento (Godoy
emparenta con la familia real) el príncipe de la Paz puede alcanzar un
prestigio que le permite imponerse a la alta nobleza. Pero no le hará
inmune a la ira de la aristocracia.
No olvidemos que el Motín de Aranjuez no fue un motín popular sino un
motín instado por la alta nobleza palaciega hacia el advenedizo Manuel.
Liquidado Manuel, una corte de nobles y Espadones gobernó a su antojo el siglo XIX español.
Manuel Godoy, duque de la Alcudia, duque de Sueca, barón de Mascalbo.
Príncipe de la Paz. Príncipe pontificio di Basano, conde de Évoramonte,
en Portugal.
Carlota Luisa de Godoy y Borbón, duquesa de Sueca, marquesa de Boadilla
del Monte, condesa de Chinchón. Obra de Luis de la Cruz y Ríos.
Duques de Sueca
Historia de los duques de Sueca
- I duque: Manuel Godoy y Álvarez-Faria, primer ministro de Carlos IV, fue creado I duque de Sueca, aunque ya había sido nombrado I duque de la Alcudia, I barón de Mascalbó y Primer y último,"Príncipe de la Paz".
El Papa, le concedió el título pontificio de I Príncipe di Basano, como
compensación a su renuncia al título de "Príncipe de la Paz". Fue
también, I Conde de Évoramonte, en Portugal.
- Caso con: María Teresa de Borbón y Vallabriga, XV condesa de Chinchón,
hija del Cardenal-Infante, Don Luis de Borbón y Farnesio y María Teresa
Vallabriga y Rozas, de la que vivió separado a partir de 1808. Al
enviudar en 1828, pudo casarse con quién había mantenido relaciones
desde joven:
- Josefa Tudó, más conocida por Pepita Tudó, que fue creada I condesa de Castillo Fiel,
para que pudieran heredar un título sus descendientes, ya que todos los
títulos de Manuel Godoy eran para los hijos de éste y de su primera
esposa.
Sucedió, de su primer matrimonio, su hija:
- Casó con el noble romano, Camilo Ruspoli, hijo de Francesco Ruspoli, Príncipe de Cerveteri y de la condesa María Leopoldina de Khevenhüller-Mestz. Le sucedió su nieto:
- Casó con Carmen Caro Caro, de los marqueses de la Romana.
- Josefa Pardo y Manuel de Villena, de los condes de Vía Manuel. Le sucedió, de su primer matrimonio, su hijo:
- Casó con Belén Morenés y Arteaga, XVIII condesa de Bañares. Le sucedió su hijo:
- Casado con María del Rosario Herbosch y Huidobro.